Buena parte de la tradición del árbol de Navidad se origina en una leyenda europea: se dice que durante una fría noche de invierno, un niño buscaba refugio. Lo recibieron en su casa un leñador y su esposa y le dieron de comer. Durante la noche, el niño se convirtió en un ángel vestido de oro: era el niño Dios. Para recompensar la bondad de los ancianos, tomó una rama de un pino y les dijo que la sembraran, prometiéndoles que cada año daría frutos. Y así fue: aquel árbol dio manzanas de oro y nueces de plata.
Por su parte, los germanos vestían sus árboles en invierno (cuando perdían hojas) para que los espíritus buenos que en ellos habitaban regresaran pronto. Los adornos más comunes eran manzanas o piedras pintadas. Se dice que éste fue el origen de los adornos. Las bolas de cristal se incorporaron alrededor del año 1750 en Bohemia. La costumbre del árbol se extendió por Europa y América durante el siglo XIX.
Las piñatas en realidad no tiene un origen mexicano, sino chino. En China se confeccionaban figuras de animales cubiertas con papeles de colores rellenas de semillas y se les golpeaba con varas de colores.
De Italia pasa a España y los conquistadores la traen consigo al Nuevo Mundo. Los catequistas aprovecharon esta costumbre depurándola y adornándola con símbolos bíblicos como la lira de David, la estrella de Belén o la rosa de Jericó, todo con vistosos colores. Con ella atraen a los indígenas a las festividades religiosas de la Navidad, en especial a los niños.
El sentido estricto de regalar como celebración del nacimiento de Jesús no ha existido nunca en el Cristianismo. En realidad, los orígenes de las ofrendas están en la tradición pagana. Encontramos muy antiguas tradiciones o llevándolo al terreno antropológico, antiguos ritos, que nos hablan de la acción de gracias por el advenimiento de un nuevo año.
Durante el solsticio de invierno y el cambio anual era obligado hacer obsequios a reyes y señores, pero también a los seres queridos, en agradecimiento a los dioses por el buen año vivido y pidiendo para el futuro que siguieran siendo benévolos. Se trataba de compartir con los más allegados una parte de los bienes materiales conseguidos ese año.
Esta hermosa idea navideña, es un símbolo que se utiliza ya sea para decorar o como un elemento religioso. La corona de Navidad que se ubica en la puerta, indica que el niño Dios se hospeda en esa casa, que es bien recibido y que sus moradores tienen fe cristiana.
Aquella que se coloca sobre la mesa principal de la casa, se dice que es una Corona de Adviento, que significa "tiempo de espera y esperanza"; indica una preparación espiritual para recibir a Jesús y es una señal indicando que viene la época navideña.
La forma de la corona tiene que ser un círculo, pues éste no cuenta con principio ni fin, indicando que de Dios venimos y a Él volveremos algún día.
Todos los adornos navideños tienen una historia (tal vez haya otras versiones de las que puse) pero al final es bien padre saber el significado de nuestras tradiciones.
Que otras cosas tradicionales ponen o hacen ustedes en esta época??
Saludos
Cuánta info! me encantó leerlo! Besos!
ResponderEliminarEstá padre saber de donde viene lo que ahora nosotros lo vemos tan normal no?
EliminarBesos